Redacción
México.- Luego de 16 horas de negociación y más de dos horas de debate en el Pleno, el Senado de la República aprobó la Ley Federal de Revocación de Mandato.
Con 101 votos a favor, dos en contra y cero abstenciones, el Pleno de la Cámara alta avaló la nueva legislación luego que Morena accedió a modificar la redacción original de la pregunta a partir de la cual se consultaría a la ciudadanía sobre la continuidad o no del jefe del Ejecutivo federal en turno.
La nueva pregunta consensuada entre Morena y la Oposición señala: «Estás de acuerdo en que a (nombre), Presidente/a de los Estados Unidos Mexicanos, se le revoque el mandato por pérdida de confianza o siga en la Presidencia de la República hasta que termine su periodo?».
La propuesta original decía: «¿Estás de acuerdo en que (nombre), Presidente de los EUM continúe ejerciendo el cargo hasta que concluya su mandato?».
Morena cedió también al retirar una reserva con la que buscaban establecer que el Gobierno federal pudiera opinar e informar sobre la continuidad de su cargo.
A cambio, la fracción mayoritaria obtuvo la posibilidad de que los partidos políticos participen en la promoción de la participación ciudadana, siempre y cuando dicha actividad no sea financiada con sus prerrogativas.
«Los partidos políticos podrán promover la participación ciudadana en el proceso de revocación de mandato y se abstendrá de aplicar los recursos derivados del financiamiento público y del financiamiento privado para la realización de sus actividades ordinarias permanentes o sus actividades tendientes a la obtención del voto con el propósito de influir en las preferencias de las ciudadanas y los ciudadanos», señala la adhesión pactada por Morena y la oposición.
Además, la fracción mayoritaria logró modificar el dictamen para establecer que el INE instalará el 100 por ciento de las casillas que en el proceso electoral anterior a la consulta, que la difusión de ésta iniciará al día siguiente de la emisión de la convocatoria y que el cómputo final y la emisión de la declaratoria de resultados ya no será responsabilidad del Tribunal Electoral, sino del INE.
El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, informó que retiraban la reserva al artículo 33 para evitar que la ley fuera judicializada.
«Les queremos decir que, en ánimo de seguir construyendo consensos, de ver hacia adelante, de expresar nuestra fe, buena fe en la construcción de acuerdos, vamos a retirar la propuesta de reserva al artículo 33 de la ley en comento, porque no queremos que se judicialice, no queremos dar motivos para que de nueva cuenta la confrontación y la polarización se lleve a cabo», anunció.
El líder de los senadores morenistas dijo que con ello su partido actúa a la altura de las circunstancias y de manera congruente, sensata y prudente.
«Queremos que este ejercicio de revocación de mandato sea ejemplar, dado que será un ejercicio inédito en la historia de México, queremos que todos lo aplaudamos», dijo.
Respecto a la nueva redacción de la pregunta, el coordinador de los senadores del PAN, Julen Rementería, señaló que no es la que la Oposición habría elegido como primera opción, pero se acerca más a lo que ésta quiere.
«Evidentemente no es la pregunta que la Oposición hubiera redactado, no es la primeramente pregunta que la Oposición hubiera redactado, hubiera sido mucho más clara, más sencilla tal vez, pero bueno, no se aleja del espíritu de lo que al final quiere la Oposición y esto también hay que reconocerlo», sostuvo.
El panista señaló que el dictamen que se tenía previsto pasar al Pleno presentaba muchas inconsistencias. No obstante, aplaudió que tras varias horas de diálogo fue posible llegar a algo que se acerca mucho más al espíritu de la revocación de mandato.
Noé Castañón de Movimiento Ciudadano aplaudió las modificaciones realizadas al proyecto de ley que buscó imponer la mayoría legislativa.
El legislador dijo que un proceso tergiversado de revocación de mandato, creado artificialmente y como traje a la medida del Presidente, era innecesario y perverso.
«La revocación de mandato es un derecho ciudadano, la revocación de mandato tiene como objetivo destituir al Presidente por falta de confianza, la revocación de mandato obedece al descontento o inconformidad de las y los ciudadanos con la gestión del Gobierno, la revocación de mandato es un castigo al Gobernante al que se le ha perdido la confianza», reiteró.
En su turno, la priista Claudia Ruiz Massieu dijo que la revocación de mandato es un mecanismo que fortalece la rendición de cuentas al permitirle a la ciudadanía evaluar el ejercicio de la gestión pública, por lo que eliminar la referencia a la pérdida de la confianza, o peor aún, invertir el sentido del mecanismo con una pregunta mal intencionada era inadmisible.
«Si se hubiera continuado con la aprobación del dictamen en los términos de las comisiones dictaminadoras, corrimos el grave riesgo de desvirtuar el mecanismo revocatorio para convertirlo en un instrumento ratificatorio», sostuvo.
La ley fue remitida a la Cámara de Diputados para su análisis.