Redacción
México.- Rafael Nadal pasó de dudar jugar el Abierto Mexicano de Tenis por agotamiento físico después de Australia a ser campeón en Acapulco por cuarta ocasión y empatar con cuatro títulos a su compatriota David Ferrer para compartir el título de máximos campeones en el AMT.
En la nueva casa del Abierto Mexicano de Tenis el español escribió el primer capítulo de su historia en el inmueble al consagrarse por doble 6-4 ante el británico Cameron Norrie y sumar su cuarto Guaje de Plata a los de 2005, 2013 y 2020.
El primero lo conquistó a los 18 años no tenía ningún título de Grand Slam; hoy a sus 35 presume 21 Grandes en el circuito varonil y no se cansa de ganar.
Antes de comenzar el partido, Nadal iba un set arriba con el público a su favor. El partido resultó premonitorio para gran parte de la afición que se congregó en la Arena GNP.
«Soy Nadalista desde chiquito», lanzó el empresario mexicano Arturo Elías Ayub, Guadalupe cumplió 5 mil 711 días como aficionada al español, cuenta que lleva siempre en una cartulina desde hace 15 años, mientras los yucatecos Karen y Eric se encontraron por la mañana al español en la playa y le desearon suerte.
El segundo set fue el más disputado y el de mejor calidad. Nadal rompió rápidamente y Norrie quebró su raqueta por frustración. Después rompió el británico, pero el fuerte golpe de derecha fue su mejor arma.
Un festejo por lo alto de Rafa quedó enmarcado como símbolo de la victoria.
«Al final más allá del título cada vez que he estado en Acapulco me llevo un recuerdo inolvidable», dijo a pie de pista.
Con la inquietud de si podría competir en el torneo mexicano después de la exhausta Final del Abierto de Australia ahora lleva 15 partidos invicto en la temporada, su mejor registro personal en el arranque en lo que va de su carrera deportiva.
En el camino venció a en Primera ronda al estadounidense Denis Kudla, en Octavos de final al lucky loser Stefan Koslov, Cuartos de final a Tommy Paul y en las Semifinales a Daniil Medvedev.
Se trata de su cuarto título en Acapulco y el dejavú de la afición mexicana se cumplió.
El austriaco Thomas Muster también ganó el torneo cuatro veces, aunque él de 1993 a 1996, cuando el torneo aún era en la Ciudad de México.