Redacción
Internacional. – Aunque el acceso a Internet continúa creciendo globalmente, los últimos datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) señalan desigualdades significativas en la conectividad a nivel mundial. Según el informe más reciente de la UIT, aproximadamente 5,400 millones de personas, lo que equivale al 67% de la población mundial, utilizan Internet. Sin embargo, la distribución no es uniforme, dejando rezagadas a personas en países de bajos ingresos.
En términos de conectividad por continentes, Europa y América lideran con un 90% de sus poblaciones conectadas a Internet, seguidos por Asia y el Pacífico con un 66%. En contraste, África muestra la brecha más amplia, con solo el 37% de su población actualmente utilizando Internet.
El análisis de la UIT destaca que no solo hay menos personas en línea en los países de bajos ingresos, sino que aquellos que tienen acceso utilizan menos datos, lo que indica una disparidad en la calidad de la conectividad en comparación con los países de altos ingresos.
En 2022, el promedio mensual de uso de datos a nivel mundial fue de 257 gigabytes (GB) por suscripción de banda ancha fija y 11 GB de banda ancha móvil. En los países de bajos ingresos, estos números fueron significativamente más bajos, con un promedio de 161 GB para banda ancha fija y solo 1 GB para conexiones móviles.
Las brechas digitales también persisten en términos de ubicación geográfica, género y generación. El 81% de los habitantes de zonas urbanas utiliza Internet, mientras que en zonas rurales este porcentaje desciende a 1.6 veces menos. Además, la brecha de género continúa, con un 70% de hombres conectados en comparación con el 65% de mujeres. A nivel generacional, se observa un aumento del uso de Internet entre los jóvenes, con un pronóstico del 79% de personas de entre 15 y 24 años que utilizarán Internet en 2023, 14 puntos porcentuales más que la población de 25 años en adelante.
Doreen Bogdan-Martin, secretaria general de la UIT, destacó la importancia de lograr una conectividad «universal y significativa» en la búsqueda de un futuro sostenible. Enfatizó que a medida que avanza la tecnología, la misión de conectar a todos se vuelve más urgente.