Redacción
México.- México está marcando un hito en el campo de la ciencia y la exploración espacial con el proyecto Colmena, que no solo representa el primer proyecto nacional enviado al espacio con fines de recopilación de información, sino que también aspira a posicionar al país como un actor destacado en la creación de productos esenciales para la industria aeroespacial internacional, según afirmó el físico Gustavo Medina-Tanco, director del Laboratorio de Instrumentación Espacial (LINX) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En una entrevista con La Jornada, Medina-Tanco compartió detalles sobre los parámetros de la operación Colmena y destacó que este proyecto no solo busca contribuir científicamente, sino también convertirse en un elemento fundamental para el desarrollo de la industria aeroespacial mexicana.
El proyecto Colmena tiene como objetivo realizar tres misiones a la Luna para 2030, adaptando instrumentos y tecnología para enfrentar condiciones adversas en la exploración espacial. La iniciativa contempla el envío de pequeños robots, con un peso aproximado de 56 gramos, capaces de trabajar en conjunto y analizar muestras del polvo lunar.
Medina-Tanco señaló que la nueva era en la exploración espacial está caracterizada por el cambio de grandes agencias a pequeñas industrias y microempresas, financiadas de diversas maneras. Destacó la importancia de que México no sea simplemente un consumidor en esta nueva etapa, sino que participe activamente y busque un nicho tecnológico innovador para el país.
A pesar de un contratiempo en el reciente lanzamiento de la cápsula Peregrino, donde se presentó un desperfecto en una válvula de combustible, los científicos mexicanos consideran que el proyecto fue exitoso en al menos un 75%, ya que los robots respondieron de manera adecuada en el espacio y se reactivaron sin problemas.
El director del LINX resaltó que este incidente no representa un fracaso, sino una confirmación de que van por el camino correcto. Además, enfatizó la importancia de aprender de los errores y considerarlos como parte del proceso de desarrollo tecnológico.
Con entusiasmo, Medina-Tanco destacó que México demuestra su potencial para ser un generador de tecnologías transformadoras del siglo XXI al operar en el espacio profundo con sus propias herramientas y equipos. Subrayó que el país ahora se encuentra en un grupo exclusivo de naciones que han operado en el espacio profundo, lo que indica un avance significativo en la capacidad tecnológica de México.