Redacción
México.- Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las muertes por todas las causas en México experimentaron una reducción significativa del 9.69% en la primera mitad del año 2023, totalizando 401,479 decesos. Sin embargo, a pesar de esta disminución, las cifras aún superan los niveles registrados antes del inicio de la pandemia de COVID-19.
El reporte destaca que las muertes en el primer semestre de 2023 fueron un 14.45% inferiores a las registradas en 2020, cuando comenzó la pandemia, pero aún se sitúan un 5.78% por encima de los números de 2019. Este indicador refleja una tendencia positiva, aunque persiste una comparación con los años previos al impacto del virus.
Un dato relevante es la notable disminución de las muertes relacionadas con el COVID-19, que dejaron de figurar entre las 10 principales causas de fallecimiento. Durante el periodo analizado, se reportaron solo 3,206 decesos por esta causa, en contraste con los 30,680 registrados en el mismo lapso de 2022.
Por segundo año consecutivo, las enfermedades del corazón se mantienen como la principal causa de muerte en México, con 97,187 decesos en los primeros seis meses del año. Le siguen la diabetes (55,885 fallecimientos), tumores malignos (45,409), enfermedades del hígado (19,819) y accidentes (19,230).
El informe revela que las tres principales causas de muerte fueron consistentes tanto en hombres como en mujeres, marcando una diferencia notoria con años anteriores. No obstante, la violencia también se destaca en las estadísticas, siendo los homicidios la octava causa de fallecimiento, con 15,082 muertes registradas en la primera mitad de 2023.
A pesar de la disminución general, el país enfrenta el desafío de mantener a raya las cifras de mortalidad, especialmente en comparación con los niveles récord alcanzados en 2021 y 2020, cuando se registraron más de 1.12 millones y cerca de 1.08 millones de muertes, respectivamente, durante el apogeo de la pandemia de COVID-19.
Los datos del Inegi provienen de registros administrativos, incluyendo certificados de defunción del Registro Civil, Servicios Médicos Forenses y cuadernos del Ministerio Público, proporcionando una visión integral de la situación de la mortalidad en el país.