Redacción
Vaticano.- El papa Francisco reiteró hoy su posición con respecto a la reciente aprobación de la bendición a parejas homosexuales o en situación irregular por parte de la Iglesia, insistiendo en que «no se bendice la unión, sino simplemente a las personas que juntas lo han solicitado». El pontífice hizo estas declaraciones al recibir a los miembros del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, cuyo responsable, el cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, fue el redactor del documento.
Francisco enfatizó que las bendiciones pastorales y espontáneas tienen la intención de mostrar la cercanía de la Iglesia a aquellos que, en diferentes situaciones, buscan ayuda para continuar o comenzar un camino de fe. Aclaró que estas bendiciones no requieren perfección moral y subrayó que cuando una pareja se acerca para solicitarlas, no se bendice la unión, sino a las personas que han hecho la solicitud.
El papa señaló que se está trabajando en un documento sobre este tema en el Dicasterio para la Doctrina de la Fe. Expresó su esperanza de que este documento ayude a la Iglesia a estar siempre cerca de aquellos que, en la vida cotidiana, luchan por defender los derechos de aquellos que a menudo son marginados.
En referencia a la declaración de bendiciones a parejas del mismo sexo, los obispos de África expresaron su desacuerdo, considerándola «no apropiada» para el contexto africano, donde las leyes que criminalizan las relaciones homosexuales son prevalentes. Francisco reiteró que las bendiciones no cambian la doctrina del sacramento del matrimonio entre un hombre y una mujer y destacó que se bendicen a las personas, no al pecado.