Redacción
México.- Gabriela Ramos, subdirectora general de Ciencias Sociales y Humanas de la UNESCO, ha advertido sobre los riesgos que la Inteligencia Artificial (IA) representa para la celebración de elecciones democráticas. En una entrevista con EFE durante el Foro Subregional de África del Este sobre Inteligencia Artificial en Nairobi, Ramos subrayó que la proliferación de «deep fakes» y otras formas de información falsa está afectando procesos electorales en todo el mundo, incluyendo los próximos comicios presidenciales de Estados Unidos el 5 de noviembre.
“La Inteligencia Artificial (IA) es un riesgo para la celebración de unas elecciones democráticas“, afirmó Ramos, haciendo hincapié en cómo la propagación acelerada de ‘deep fakes’ a través de sistemas de IA generativos está aumentando su capacidad analítica y producción de resultados falsos.
Ramos reconoció que la desinformación está afectando a elecciones en diversos países. En Estados Unidos, se está considerando prohibir las ‘deep fakes’ para mitigar su impacto negativo. La UNESCO cuenta con un programa de trabajo para responsabilizar a las plataformas que operan con IA y ha elaborado las Recomendaciones Éticas sobre Inteligencia Artificial, un documento firmado en 2021 por 194 países, que busca acciones concretas para abordar estos desafíos.
“Si tú lo penalizas, si tú lo conviertes en un crimen, elevas el costo a quienes vayan a utilizar ese tipo de prácticas para influir o incidir de una manera negativa en las elecciones”, explicó Ramos. Además, sugirió que cualquier contenido generado por IA debería llevar una marca de agua para facilitar su identificación como falso.
Ramos también abogó por una respuesta jurídica robusta. Recordó el caso de Claudia Sheinbaum, la nueva presidenta de México, quien fue víctima de un vídeo falso durante la campaña electoral. Subrayó la importancia de establecer mecanismos jurídicos bajo el Estado de Derecho y la rendición de cuentas para perseguir y sancionar estos delitos.
Según Ramos, si se invierten billones de dólares en el desarrollo de IA, los gobiernos deben invertir en la capacidad institucional, analítica y personal para proteger a la sociedad. Las empresas deben responsabilizarse desde el inicio, asegurándose de que sus datos sean representativos, no sesgados y de alta calidad.
Ramos también destacó la necesidad de condiciones laborales justas para los supervisores de contenido. Criticó el caso de trabajadores en Kenia contratados por Chat GPT para identificar contenido nocivo, quienes ganan apenas dos dólares la hora.
A pesar de los riesgos, Ramos remarcó el potencial positivo de la IA en áreas como la salud, sugiriendo su uso en teleconsultas y diagnósticos en regiones con pocos recursos hospitalarios. También señaló la IA como una herramienta para combatir la corrupción y la discriminación de género en América Latina.
Con orgullo, Ramos mencionó que México tiene a su primera presidenta mujer, Claudia Sheinbaum, y destacó la importancia de la inclusión de mujeres en reuniones empresariales y de gobierno.
Finalmente, Ramos afirmó que la UNESCO trabaja con actores internacionales como el G20 y el G7 para adoptar decisiones que regulen las tecnologías de IA, asegurando que se utilicen para fortalecer los derechos humanos, las libertades fundamentales, la dignidad humana, la sostenibilidad y la justicia social con transparencia y responsabilidad.