El próximo 28 de agosto, París dará inicio a los Juegos Paralímpicos, enfrentando nuevos desafíos sociales y marcando un hito en la historia del deporte para personas con discapacidad. Con la participación de aproximadamente 4,400 atletas de 182 países, estos serán los primeros Juegos Paralímpicos celebrados en la capital francesa, que ha realizado significativas adaptaciones para garantizar la accesibilidad e inclusión de todos los participantes.
Entre las mejoras realizadas en la ciudad se encuentran la adaptación de estaciones de metro y tren, la incorporación de ascensores, rampas y señalización táctil, así como la implementación de semáforos sonoros. Estas medidas forman parte de un plan a largo plazo que busca no solo facilitar la movilidad durante los Juegos, sino también dejar un legado duradero para las 1.7 millones de personas con discapacidad visual en Francia.
Un aspecto destacado de esta edición es el récord de participación femenina. El Comité Paralímpico Internacional (CPI) anunció que competirán 1,983 mujeres, lo que representa un 45% del total de atletas, superando la cifra de Tokio 2020 y más del doble de las participantes en Sidney 2000. Tony Estanguet, presidente de París 2024, calificó este logro como un hito, señalando que estos serán los primeros Juegos en los que se alcanzará un equilibrio de género.
Además de la equidad de género, los Juegos de París 2024 contarán con una participación internacional sin precedentes, con 168 delegaciones, superando los récords anteriores de Londres 2012 y Tokio 2020.
En el aspecto económico, los organizadores han destinado aproximadamente 1,000 millones de euros del presupuesto total de 4,380 millones específicamente a los Juegos Paralímpicos. Este financiamiento se ha invertido en instalaciones accesibles, logística adaptada y campañas de sensibilización que buscan promover la inclusión y el respeto hacia las personas con discapacidad.
El ayuntamiento de París ha lanzado campañas como «Juntos por la Inclusión» y «Deporte para la Inclusión«, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de quienes enfrentan barreras de accesibilidad y dejar un impacto duradero en la sociedad parisina. Estas iniciativas pretenden que el legado de los Juegos Paralímpicos de París 2024 se extienda más allá del evento, promoviendo una mayor inclusión y respeto en la vida cotidiana de la ciudad.