Con 116 votos a favor y cero en contra, el Senado de la República aprobó una reforma para declarar el 1 de octubre de cada seis años como día de descanso obligatorio. Este día coincidirá con la toma de protesta del nuevo titular del Poder Ejecutivo Federal, marcando un momento significativo en la transición de liderazgo en el gobierno de México.
La reforma armoniza la Ley Federal del Trabajo con el artículo 83 de la Constitución Política, lo que significa que el 1 de octubre se sumará a los días de descanso ya establecidos por la ley laboral. El dictamen aprobado señala que este día no solo representará un cambio de liderazgo, sino también un momento de reflexión y unión nacional. «El 1 de octubre no solo implicará un día de cambio de liderazgo en el gobierno federal, sino también un momento de descanso, reflexión y preservación de la herencia cultural cívica y política, para que la nación se una en torno a la celebración de la democracia y la estabilidad política, económica y social de México», se indica en el documento.
La propuesta, que fue aprobada de manera unánime por el Senado, será enviada a la Cámara de Diputados para su discusión y, en su caso, aprobación final. De aprobarse en la Cámara Baja, la reforma entrará en vigor y se aplicará en la próxima transición presidencial, otorgando a la población un día de descanso adicional.
Esta medida busca no solo facilitar la transición del Poder Ejecutivo, sino también fortalecer la cultura cívica y política en el país, brindando a los ciudadanos un espacio para reflexionar sobre la importancia de la democracia y la estabilidad en México.