Nvidia, el gigante tecnológico especializado en chips de inteligencia artificial, se encontraba este jueves a punto de convertirse en la empresa más valiosa de la historia, al alcanzar una capitalización bursátil de 3.92 billones de dólares, impulsada por el creciente entusiasmo del mercado por el desarrollo de la IA.
Las acciones de la compañía con sede en Santa Clara, California, subieron un 2.2% durante la sesión matutina en Wall Street, cotizándose en 160.6 dólares por título, lo que elevó su valor de mercado por encima del récord de cierre de Apple (3.915 billones de dólares), registrado el 26 de diciembre de 2024.
El avance de Nvidia se explica por el papel protagónico que ha tomado en el ecosistema de inteligencia artificial. Sus chips de última generación son clave en el entrenamiento de modelos cada vez más complejos, y su demanda ha crecido vertiginosamente a medida que empresas como Microsoft, Amazon, Meta, Alphabet y Tesla aceleran la construcción de centros de datos para liderar la nueva era tecnológica.
“Cuando la primera compañía superó el billón de dólares, fue asombroso. Y ahora estamos hablando de cuatro billones, lo cual es simplemente increíble”, comentó Joe Saluzzi, codirector de operaciones de Themis Trading. “Esto demuestra que hay un gran auge en la inversión en IA y que todo el mundo la está persiguiendo ahora mismo”.
Actualmente, Microsoft ocupa el segundo lugar en el ranking de capitalización bursátil, con un valor de 3.7 billones de dólares, mientras que Apple cae al tercer lugar con 3.19 billones.
Valor meteórico
Desde 2021, el valor de Nvidia se ha multiplicado por ocho, pasando de 500 mil millones de dólares a su nivel actual. Este crecimiento ha sido tan acelerado que ahora la empresa vale más que las bolsas de valores de Canadá y México combinadas, e incluso que todas las empresas que cotizan en la bolsa del Reino Unido, según datos de LSEG.
En términos de rentabilidad, Nvidia cotiza actualmente a unas 32 veces las ganancias estimadas para los próximos 12 meses, una valoración considerada modesta en comparación con su promedio de los últimos cinco años (41 veces), lo que refleja que sus beneficios han crecido a un ritmo similar al de sus acciones.
Desde el 4 de abril, las acciones de Nvidia han subido más del 68%, beneficiándose también del clima político favorable en Estados Unidos, donde los mercados anticipan una postura más conciliadora de la Casa Blanca respecto a los acuerdos comerciales globales.
Nvidia, que inició desarrollando procesadores gráficos para videojuegos, es ahora la pieza clave de la revolución de la inteligencia artificial. Con una ponderación de 7.4% en el índice S&P 500, su influencia en los mercados es ya incuestionable, y su ascenso podría marcar el inicio de una nueva hegemonía en el sector tecnológico mundial.