La Secretaría de Salud ha encendido las alarmas: los casos de coqueluchoide en México se han cuadruplicado en 2025. Según el Boletín Epidemiológico, hasta la Semana Epidemiológica 32, el país ha registrado 4,339 casos, un aumento preocupante comparado con los 997 del año anterior. Este incremento impacta a prácticamente todos los estados y afecta principalmente a los niños.
Las cifras muestran un aumento dramático en varios estados. Por ejemplo, la Ciudad de México ha reportado 425 casos, mientras que en 2024 solo hubo 33. En Aguascalientes, los casos se dispararon de 11 a 228. Este patrón se repite en entidades como Coahuila, Guanajuato y Nuevo León, destacando la urgencia de abordar la situación.
El síndrome coqueluchoide afecta especialmente a niños menores de 5 años, predominando en niñas. Se transmite por contacto directo, inhalando gotas expulsadas por personas infectadas. Los síntomas incluyen episodios de tos severa, a veces con jadeo y vómito. El tratamiento involucra antibióticos y cuidados hospitalarios en casos graves.
Las autoridades recomiendan la vacunación con DTP para prevenir tanto el coqueluchoide como la tos ferina. La vacunación y medidas de higiene son esenciales para proteger a los más vulnerables.
Ante el aumento de casos de coqueluchoide, es crucial que los padres estén alertas y tomen precauciones. La comunidad médica y las autoridades de salud trabajan juntas para controlar este brote, pero todos debemos colaborar.