El escritor húngaro László Krasznahorkai, nacido en 1954 en la ciudad de Gyula, obtuvo este jueves el Premio Nobel de Literatura 2025 “por su obra cautivadora y visionaria que, en medio del terror apocalíptico, reafirma el poder del arte”, anunció el Comité Nobel de Literatura en Estocolmo.
El presidente del comité, Anders Olsson, describió al autor como “un gran escritor épico de la tradición centroeuropea, que se extiende desde Franz Kafka hasta Thomas Bernhard y se caracteriza por el absurdo y el exceso grotesco”. Añadió que, además de esa raíz, Krasznahorkai posee una mirada más contemplativa e introspectiva, influenciada por sus viajes a China y Japón.
El maestro del apocalipsis
Krasznahorkai debutó en 1985 con su célebre novela “Tango satánico” (Sátántangó), ambientada en un remoto pueblo húngaro que refleja el paisaje de su infancia. La obra, considerada su cumbre por muchos críticos, fue adaptada al cine por su compatriota Béla Tarr, en una película de culto de más de siete horas de duración.
Su siguiente libro, “La melancolía de la resistencia” (Az ellenállás melankóliája, 1989), consolidó su reputación internacional. La escritora Susan Sontag lo definió entonces como “el maestro del apocalipsis de la literatura contemporánea”. En esta historia, Krasznahorkai retrata un pueblo ficticio en los Cárpatos donde el caos, la fe y la decadencia se entrelazan en una atmósfera opresiva y alegórica.
En “Guerra y Guerra” (Háború és háború, 1999), el autor expandió su mirada más allá de Hungría y consolidó su característico estilo narrativo: frases extensas, sin puntos, que fluyen como un pensamiento continuo, símbolo de una mente atrapada entre la lucidez y la desesperación.
Entre Europa y Oriente
En su faceta más introspectiva, Krasznahorkai ha explorado temas espirituales y filosóficos influenciados por la estética oriental. Su novela de 2003, “Una montaña al norte, un lago al sur, caminos al oeste, un río al este”, es descrita por Olsson como “un relato misterioso con poderosas secciones líricas” que revela una sensibilidad más contemplativa.
Además de sus novelas, el autor ha publicado cuentos, ensayos y obras breves que exploran la relación entre el caos y la trascendencia, el arte y la ruina, el silencio y el pensamiento.
De las letras al cine
Parte de su obra ha trascendido las páginas: tanto Sátántangó como La melancolía de la resistencia fueron adaptadas al cine por Béla Tarr, bajo los títulos Sátántangó y Werckmeister harmóniák (Las armonías de Werckmeister), filmes que capturan el tono sombrío y la intensidad visual de su prosa.
Con el Premio Nobel de Literatura 2025, László Krasznahorkai se suma al legado de autores que han transformado la narrativa europea contemporánea. Su voz, entre la devastación y la esperanza, reafirma —como destacó el jurado— “el poder del arte para iluminar incluso los paisajes más oscuros del alma humana”.