En un hecho sin precedentes, Maldivas se convirtió este domingo en el primer país del mundo en aplicar una “Prohibición Generacional” del tabaco, una medida que impide fumar a todas las personas nacidas en 2007 o en años posteriores. La norma, que entró en vigor a la medianoche del sábado al domingo, marca un nuevo capítulo en la lucha global contra el tabaquismo.
El presidente Mohamed Muizzu firmó la entrada en vigor de la medida y defendió su objetivo de “erradicar los hábitos no saludables mediante un esfuerzo social colectivo”, según informó el diario local Mihaaru.
La legislación también eleva la edad mínima para comprar productos relacionados con el tabaco de 18 a 21 años, y establece que los comercios deberán verificar la edad en cada venta. Con ello, el gobierno maldivo busca restringir progresivamente el acceso a los cigarrillos y reducir el impacto sanitario y económico del tabaquismo.
De acuerdo con datos oficiales, el país importa alrededor de 500 millones de cigarrillos al año, con un valor estimado de 56 millones de euros, mientras que el gasto sanitario representa el 9.7% del PIB nacional.
Como parte de la campaña de concientización, el Ministerio de Sanidad organizó una carrera de relevos de 24 horas coincidiendo con la entrada en vigor de la norma, en un llamado simbólico a “pasar la estafeta” hacia una generación libre de tabaco.
Las autoridades recordaron que el país ya había prohibido la importación de cigarrillos electrónicos y vapeadores en noviembre de 2024, dentro de su plan para “construir una generación saludable”.
Con esta iniciativa, Maldivas se adelanta al resto del mundo en un ambicioso intento de romper con la dependencia del tabaco desde la raíz, convirtiéndose en un ejemplo global de política sanitaria preventiva.