La próxima vez que escuches “sírvete lo que quieras”, quizá quieras pensarlo dos veces. Un estudio internacional encabezado por la Universidad George Washington reveló que hasta una de cada cinco infecciones del tracto urinario (ITU) podría tener su origen en carne contaminada con Escherichia coli.
La investigación, publicada en la revista científica One Health, analizó muestras de carne cruda de pollo, pavo y cerdo, así como cepas de E. coli extraídas de pacientes con ITU. Gracias a la secuenciación genómica, los científicos encontraron coincidencias genéticas entre bacterias presentes en los alimentos y las detectadas en humanos.
De acuerdo con el estudio titulado “Using source-associated mobile genetic elements to identify zoonotic extraintestinal Escherichia coli infections”, se estima que entre 8 % y 20 % de las infecciones urinarias causadas por E. coli podrían originarse en la carne contaminada. A escala nacional, esto equivale a entre 480 mil y 640 mil casos anuales solo en Estados Unidos.
El hallazgo rompe con la visión tradicional de que las ITU se deben únicamente a contaminación intestinal o factores anatómicos. “Este estudio redefine la prevención: no solo la higiene íntima, sino también la seguridad alimentaria son clave para evitar infecciones”, señalan los autores.
🔗 De la cocina al tracto urinario
Durante el sacrificio y procesamiento de los animales, bacterias intestinales pueden contaminar la carne. Si el producto no se manipula o cocina correctamente, las cepas de E. coli pueden colonizar el intestino humano y migrar hacia el tracto urinario, provocando infección.
El riesgo aumenta cuando se usa la misma tabla o cuchillo para carne cruda y alimentos cocinados, o cuando se consume carne poco cocida o mal refrigerada.
🚨 Riesgos y síntomas
Las ITU suelen manifestarse con ardor al orinar, urgencia, orina turbia o con mal olor, y dolor pélvico. En casos graves, las bacterias ascienden a los riñones, generando fiebre, escalofríos o incluso sepsis.
Los investigadores advierten que las cepas de origen alimentario pueden ser más resistentes a los antibióticos, lo que complica el tratamiento y aumenta la posibilidad de infecciones recurrentes.
🧼 Cómo protegerte
En la cocina:
- Lava bien las manos después de manipular carne cruda.
- Usa utensilios y tablas diferentes para carne y otros alimentos.
- Cocina completamente los productos de origen animal.
- Desinfecta superficies y refrigeradores con regularidad.
En tu salud diaria:
- Bebe suficiente agua.
- Mantén una correcta higiene íntima.
- Consulta a tu médico si sufres infecciones urinarias frecuentes.
A nivel global, los autores recomiendan reforzar las regulaciones sanitarias y reducir el uso de antibióticos en la ganadería, ya que la salud humana y la seguridad alimentaria están más entrelazadas de lo que se pensaba.
El vínculo entre la carne y las infecciones urinarias replantea la manera en que entendemos la prevención: lo que ocurre en la cocina puede impactar directamente en la salud.