La creciente ola de fraudes bancarios en línea, facilitados por enlaces patrocinados en buscadores, encendió las alarmas de la banca mexicana. Este jueves, la institución financiera Bankaool denunció que solo en lo que va de 2024 ha detectado intentos de fraude que pusieron en riesgo más de 400 millones de pesos, mediante páginas falsas promovidas como anuncios pagados en plataformas como Google.
En conferencia de prensa, Juan Antonio Pérez Simón, director general de Bankaool, y Leonardo Rodríguez, director de Auditoría Tecnológica e Innovación, revelaron que se han interpuesto 90 denuncias formales ante la Fiscalía General de la República (FGR), derivadas de al menos 200 sitios fraudulentos detectados.
“Dos de cada tres fraudes que enfrentamos provienen de enlaces patrocinados que aparecen en los buscadores. Este problema afecta a clientes de todos los bancos y crece año con año. Es urgente combatirlo”, subrayó Pérez Simón.
Según datos compartidos por la entidad, Google es el motor de búsqueda más utilizado por los internautas mexicanos (89.47%), lo que lo convierte en la plataforma más empleada por los ciberdelincuentes para promover sus sitios falsos. Le siguen Bing (8.08%) y Yahoo (1.84%).
Rodríguez explicó que los delincuentes crean réplicas casi exactas de las páginas oficiales de los bancos, con pequeñas variaciones en las direcciones electrónicas, y luego invierten en publicidad para posicionarlas entre los primeros resultados de búsqueda. Una vez que el usuario accede, los estafadores capturan su información financiera.
México es actualmente el segundo país de América Latina con mayor número de ciberataques, y este tipo de fraudes tiende a aumentar durante épocas de alta circulación de dinero, como el reparto de utilidades o las festividades decembrinas.
Aunque Bankaool y otras instituciones han desplegado campañas informativas para prevenir estos delitos, sus directivos consideran que no son suficientes. Por ello, impulsan una iniciativa dentro del sector financiero para revisar el marco regulatorio actual y establecer medidas que obliguen a las plataformas digitales a verificar la identidad de sus anunciantes financieros.
Como ejemplo a seguir, proponen el modelo del Reino Unido, donde desde 2021 Google solo permite la publicación de anuncios financieros de instituciones previamente autorizadas por la Financial Conduct Authority.
“Se necesita una regulación clara que garantice que las plataformas tecnológicas no sean cómplices involuntarias de estos fraudes. La colaboración es esencial para proteger a los usuarios”, concluyó Rodríguez.