El Presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó este domingo un multitudinario evento en el Zócalo de la Ciudad de México para presentar su Sexto Informe de Gobierno, el último acto público en el que se dirigirá a sus seguidores desde la emblemática Plaza de la Constitución. A tan solo 30 días de concluir su mandato, el mandatario tabasqueño marcó el inicio de su despedida con un mitin en el que estuvo acompañado por una multitud de simpatizantes, así como por su sucesora, Claudia Sheinbaum, y miembros de su familia.
El evento, que incluyó la instalación de un imponente templete y 25 mil sillas para los asistentes, fue organizado por la estructura del partido Morena, con el apoyo de los 23 gobernadores de la Cuarta Transformación (4T). Entre los invitados de honor se encontraban miembros del gabinete federal, gobernadores, diputados, senadores y dirigentes de Morena, PT y PVEM, así como futuros integrantes del próximo gobierno.
Durante su discurso, López Obrador destacó uno de los logros más importantes de su administración: la mejora del sistema de salud pública en México. El presidente aseguró que el sistema IMSS-Bienestar, implementado en 23 estados para brindar atención médica gratuita y universal a quienes no cuentan con seguridad social, «ya es más eficaz del mundo». «Dije que iba a ser el mejor, que iba a ser como en Dinamarca, no, no es como en Dinamarca, es mejor que en Dinamarca», afirmó.
López Obrador detalló que el sistema de salud cuenta ahora con 11,935 unidades médicas, 669 hospitales, 42,322 médicos generales, 126,762 enfermeras y 30,346 especialistas. Además, destacó la basificación de 176,808 trabajadores de la salud que antes estaban contratados por honorarios y con sueldos precarios, cumpliendo así con una de sus promesas de campaña.
A pesar de la celebración, un grupo de madres de desaparecidos se mantuvo acampando al pie del asta bandera, tal como lo han hecho desde el pasado 18 de agosto. Hasta el momento, estas activistas no han sido recibidas por el Presidente.
El evento marcó la novena vez que López Obrador llena el Zócalo desde su triunfo electoral en 2018, incluyendo su toma de posesión y varios aniversarios de su llegada al poder. Este mitin no solo representa el cierre de una era para el mandatario, sino también el inicio de la transición hacia el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum, quien tomará las riendas del país en poco más de un mes.