Redacción
México.- El titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, anunció el progreso en las acciones de rescate de los mineros atrapados en Pasta de Conchos y El Pinabete, minas ubicadas en Coahuila. Durante una conferencia de prensa junto al presidente Andrés Manuel López Obrador, Bartlett informó que en el caso de Pasta de Conchos, se espera llegar a la boca de la galería donde se encuentran sepultados los cuerpos de los 63 mineros en mayo, después de 18 años de la tragedia.
El esfuerzo de recuperación ha sido monumental, con la exploración de minas colapsadas y una serie de trabajos de gran envergadura para acceder a las galerías donde se encuentran los mineros. Bartlett criticó la falta de acción del Grupo México, propietario de la mina, durante los años posteriores al accidente, destacando que la empresa no realizó esfuerzos suficientes para rescatar a los mineros atrapados.
César Fuentes, director corporativo de Ingeniería y Proyectos de Infraestructura de la CFE, detalló los avances en el proyecto de búsqueda y recuperación. Se han realizado excavaciones para acceder a las galerías antiguas, así como la construcción de lumbreras y rampas de acceso. Se estima que la búsqueda de los mineros atrapados comenzará el 6 de mayo, marcando un hito en el largo proceso de recuperación.
Sin embargo, las familias de los mineros expresaron preocupación por la seguridad de los trabajadores ante el plan propuesto por la CFE. La organización Familia Pasta de Conchos rechazó la propuesta de la Comisión, argumentando que el esquema presentado representa un riesgo para los trabajadores debido a la falta de medidas de seguridad adecuadas. Solicitaron la aplicación de normas de seguridad y la intervención de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social para garantizar la protección de los participantes en las labores de rescate.
La tragedia en Pasta de Conchos, ocurrida el 19 de febrero de 2006, ha dejado una huella indeleble en la historia de México. De los 76 trabajadores presentes en la mina en el momento de la explosión, solo dos cuerpos fueron recuperados durante las primeras labores de rescate. Desde entonces, las familias de los mineros han luchado incansablemente por el rescate de sus seres queridos, enfrentando obstáculos y revictimización por parte de los gobiernos.