El consumo de bebidas azucaradas en México tuvo un impacto devastador en la salud pública en 2020, con 46 mil muertes atribuidas a enfermedades como diabetes y padecimientos cardiovasculares, según un estudio publicado en la revista Nature Medicine.
El informe, elaborado por instituciones de salud internacionales y promovido por la organización El Poder del Consumidor, revela que el 30% de los nuevos casos de diabetes en el país están relacionados con la ingesta de estas bebidas, así como el 14.9% de las muertes por esta enfermedad. Además, el 13.5% de los nuevos casos de enfermedades cardiovasculares y el 9.2% de los fallecimientos por este tipo de padecimientos también fueron atribuidos al consumo de estos productos.
Jorge Vargas, investigador de El Poder del Consumidor, destacó que esta crisis representa una enorme carga para el sistema de salud. Tan solo en 2022, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) destinó 50 mil millones de pesos para la atención de la diabetes, 37 mil millones para la hipertensión y 21 mil millones para enfermedades renales, sumando un total de 109 mil millones de pesos en tratamientos relacionados.
Ante esta situación, la investigadora Ana Larrañaga llamó al Gobierno a tomar medidas urgentes para reducir el consumo de bebidas azucaradas. Entre las propuestas destacan el aumento del impuesto especial a estos productos, que actualmente es del 10%, la regulación de su publicidad dirigida a menores de edad y la prohibición de su venta en entornos escolares.
“El llamado es que el Gobierno ejerza medidas encaminadas a reducir el consumo de estas bebidas”, enfatizó Larrañaga.
Los especialistas también exigieron que la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) declare a estos productos como un riesgo sanitario, advirtiendo que su impacto en la salud pública seguirá creciendo si no se toman acciones contundentes.