Redacción
México.- El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) ha revelado su Índice de Competitividad Estatal 2024, destacando que Ciudad de México, Baja California Sur y Coahuila son las entidades más competitivas del país. Estos estados presentan más elementos para retener talento y atraer inversiones, mientras que Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Michoacán se sitúan en los últimos lugares de la lista.
La Ciudad de México es la única entidad que obtuvo una puntuación “muy alta”, sobresaliendo en rubros como cobertura educativa, grado promedio de escolaridad, infraestructura hospitalaria, y tasa de personal médico especializado. Otros puntos a favor incluyen su PIB per cápita, diversificación económica, y el uso de tecnologías financieras y digitales. Sin embargo, enfrenta retos significativos en mortalidad infantil, agresiones a periodistas, percepción de corrupción estatal e incidencia delictiva.
Baja California Sur, con una evaluación “alta”, destaca en percepción de seguridad, inversión extranjera directa, PIB turístico, infraestructura hospitalaria, y flujo de pasajeros aéreos. A pesar de sus fortalezas, enfrenta desafíos en intensidad energética de la economía, exportación de mercancías, y diversificación económica.
Coahuila también recibió una evaluación “alta”, sobresaliendo en servicios notariales, acceso a salud, percepción de seguridad, y exportación de mercancías. No obstante, debe mejorar en áreas como agresiones a periodistas, PIB turístico, inversión extranjera directa, y cobertura educativa.
En contraste, Oaxaca muestra los mayores rezagos en inversión extranjera directa, acceso a salud, y uso de tecnologías financieras. Guerrero enfrenta problemas en delitos no denunciados, competencia en servicios notariales, y acceso a salud. Chiapas lucha con un bajo PIB per cápita, infraestructura hospitalaria deficiente, y baja cobertura educativa. Michoacán tiene como mayor desafío la cobertura educativa, además de problemas en seguridad y acceso a tecnologías.
Para impulsar la competitividad, el IMCO propone diseñar estrategias locales de atracción de inversión enfocadas al nearshoring, crear agencias estatales, y promover la digitalización para mejorar el acceso a servicios de telecomunicaciones e internet. También sugiere fomentar la vinculación entre industrias e instituciones educativas para desarrollar habilidades en STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), y mejorar el uso de medios digitales para denuncias y seguimiento procesal.
Asimismo, recomienda diseñar estrategias digitales para mejorar el acceso a servicios de salud, favorecer el uso de expedientes clínicos digitales, y manejar proactivamente la deuda pública para financiar proyectos productivos que resuelvan problemáticas locales.