La custodia de mascotas en divorcio ahora se regula de una manera innovadora gracias a una reforma aprobada por el Congreso local de la Ciudad de México. Este cambio en el Código Civil permite considerar a las mascotas como seres sintientes, lo que significa que durante un proceso de divorcio, se podrá acordar quién se queda con el cuidado de estos compañeros peludos.
En la actualidad, el 30% de los matrimonios terminan en divorcio. Esta realidad, junto con la tendencia de adoptar mascotas en lugar de tener hijos, ha motivado cambios legales. El juez puede ahora decidir la custodia de las mascotas basándose en la capacidad de cada parte para ofrecer un ambiente seguro, tiempo y recursos.
Además, si el juez lo considera apropiado, podrá asignar un cuidado compartido de la mascota. Esto busca garantizar su bienestar, alimentación y atención veterinaria, siempre priorizando sus derechos como seres sintientes.
La reforma también reconoce los nuevos tipos de familias, como las multiespecie, donde humanos y animales comparten la vida diaria. Este cambio responde a estudios científicos que demuestran que los animales experimentan emociones como placer, tristeza o miedo.
Antes de esta reforma, el Código Civil ya había avanzado en reconocer a los animales como sujetos de trato digno. Esto obliga a las personas a respetar la vida de los animales y velar por su bienestar, adaptándose a sus necesidades biológicas.
Según la Procuraduría Ambiental, más del 50% de las denuncias ciudadanas en 2024 fueron por maltrato animal. Con esta reforma, se espera mejorar la protección y bienestar de los animales en situaciones de divorcio.