En el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía presentó cifras que exponen las condiciones de vida de 9.5 millones de mexicanos que viven con alguna discapacidad, equivalentes al 7.3% de la población nacional. La mayoría son adultos mayores: 50.9% tiene 60 años o más, lo que refleja el estrecho vínculo entre envejecimiento y discapacidad.
Las desigualdades económicas se evidencian en los ingresos: mientras una persona sin discapacidad percibió en promedio 31 mil 098 pesos mensuales en 2024, quienes tienen alguna dificultad reportaron solo 20 mil 782 pesos. Esta brecha se refleja en un mayor gasto en salud. Uno de cada cinco hogares en México tiene al menos un integrante con discapacidad y estos destinan 3 mil 415 pesos trimestrales a cuidados médicos, muy por encima de los 2 mil 248 pesos en hogares sin discapacidad.
Los gastos en aparatos ortopédicos, terapias y consultas externas también aumentan de forma considerable cuando un integrante presenta alguna limitación, especialmente si se trata de adultos mayores. Pese a ello, solo 40.5% de las personas con discapacidad considera suficiente el apoyo económico que recibe, incluso cuando su acceso a programas gubernamentales es mayor que el de la población general.
En el terreno laboral, 102 mil unidades económicas reportaron emplear a personas con discapacidad, principalmente en comercio y servicios; sin embargo, persisten retos vinculados a limitaciones visuales y de movilidad.
El INEGI destacó que la información generada es clave para impulsar políticas públicas que promuevan inclusión, accesibilidad y mejores condiciones de vida para este sector de la población.