Redacción
México.– La Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz confirmó en un comunicado el hallazgo de cuerpos desmembrados en congeladores de dos inmuebles en la ciudad de Poza Rica. La titular de la dependencia, Verónica Hernández Giadáns, informó que la Dirección General de Servicios Periciales está realizando pruebas de criminalística en campo y laboratorio para determinar el número de víctimas y sus identidades.
De acuerdo con la fiscal de Veracruz, los primeros indicios sugieren que al menos 13 cadáveres están involucrados en este macabro descubrimiento. Se anunció que seis personas están detenidas por su presunta relación con estos hechos, aunque sus identidades y grado de implicación no fueron revelados en ese momento.
El comunicado oficial dejó abierta la posibilidad de que el número de cuerpos sea mayor, pero descartó la cifra inicial de 34 que había sido reportada anteriormente en algunos informes. La fiscal Hernández Giadáns enfatizó que cualquier dato sobre el número de víctimas carece de soporte técnico y científico en este momento.
Los restos humanos fueron trasladados a la Unidad Integral de Servicios Médicos Forenses para su análisis. La Fiscalía confirmó la colaboración de sus agentes con peritos y agentes de la Policía Ministerial en la integración de indicios en el expediente.
El operativo que llevó al hallazgo comenzó cuando un grupo de elementos policiales se enfrentó a un comando de civiles armados que los habría atacado. Durante la persecución, los agresores se refugiaron en una casa en la colonia Guadalupe Victoria, donde se descubrieron varias hieleras con restos anatómicos cercenados. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) también se involucró en el caso.
Otro cateo en un domicilio de la calle Azalea en el fraccionamiento Jardines también condujo al descubrimiento de restos humanos. Durante las inspecciones, se identificaron tres de las seis personas detenidas, así como un vehículo y presunta droga de características no especificadas.
El gobernador Cuitláhuac García sugirió que estos hechos podrían estar relacionados con un «ajuste de cuentas» entre organizaciones criminales y reafirmó su compromiso de combatir la delincuencia en el estado.