El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció este jueves sanciones contra seis miembros de la familia Hysa, de origen albanés, y una persona adicional, por presuntamente utilizar su red de casinos y restaurantes en México, Canadá y Polonia para lavar fondos del Cártel de Sinaloa.
De acuerdo con el comunicado oficial, la medida fue resultado de una operación coordinada con el gobierno mexicano y busca aislar del sistema financiero estadounidense a los negocios controlados por la familia. “Estados Unidos y México están trabajando juntos para combatir el lavado de dinero en el sector de los juegos de azar de México. Nuestro mensaje a quienes apoyan a los cárteles es claro: tendrán que rendir cuentas”, declaró John K. Hurley, subsecretario del Tesoro.
Las autoridades estadounidenses señalan que Luftar Hysa, considerado el principal operador del grupo y residente entre México y Canadá, habría colaborado con un individuo no identificado en Estados Unidos para trasladar grandes sumas de efectivo desde territorio mexicano hacia el norte del continente.
El anuncio del Tesoro se produce un día después de que el gobierno de México informara sobre la suspensión de operaciones en 13 casinos por presuntas actividades de lavado de dinero en el extranjero. Hasta el momento, no se ha confirmado si ambos casos están vinculados.
Por su parte, Grupo Salinas —propiedad del empresario Ricardo Salinas— informó que dos de los establecimientos afectados le pertenecen, aunque negó cualquier implicación en actividades ilícitas.
La familia Hysa, que ha expandido su imperio de entretenimiento en América del Norte durante las últimas dos décadas, ha rechazado públicamente en diversas ocasiones tener vínculos con el crimen organizado. Sin embargo, las autoridades estadounidenses sostienen que sus negocios han servido como un entramado financiero clave para el Cártel de Sinaloa, uno de los más poderosos del mundo.