Redacción
Estados Unidos.- El gobierno de Estados Unidos va contra cuatro de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, y herederos del Cártel de Sinaloa, por quienes ha ofrecido una recompensa de hasta 20 millones de dólares.
Joe Biden firmó una orden ejecutiva que incluye a Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López. Por cada uno se ofertan 5 millones de dólares, ya sea que se ofrezca información que conduzca a su paradero o arresto.
Los cuatro son miembros de alto rango del Cartel de Sinaloa y cada uno está sujeto a una acusación federal por su participación en el tráfico ilícito de drogas
Luego de la caída del Chapo Guzmán, los Chapitos tomaron el control de la fracción en el grupo criminal y han desatado una ola violenta por la disputa de diversas plazas para el trasiego de narcóticos desde México a EEUU.
A su vez, los hijos de Guzmán Loera fueron designados por el Departamento del Tesoro bajo la Ley Kingpin, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC). De acuerdo con los reportes, operan desde Culiacán, capital de Sinaloa.
Todas las cuentas, bienes muebles e inmuebles, así como empresas serán confiscadas o congeladas por las autoridades de EEUU. Esta norma, aprobada por el Congreso estadounidense en 1999, le otorga autoridad a la administración de Biden para aplicar sanciones a los narcotraficantes extranjeros importantes, así como a sus organizaciones con operaciones en todo el mundo.
De acuerdo con informes de la OFAC, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, el Chapito, rondaría los 41 de edad, pues su nacimiento se ubica el 2 de octubre de 1980 en Sinaloa. Mientras que su hermano Jesús Alfredo, el Alfredillo, de 35 años, habría nacido el 17 de mayo de 1986 en Zapopan, Jalisco, donde se registran ocho direcciones que también incluyen la zona de Guadalajara y Tequila.
El hermanastro de ambos, Ovidio Guzmán López, el Ratón y/o Ratón nuevo, nació el 29 de marzo de 1990 en Culiacán y ahora cuenta con 31 años; mientras que del hermano directo de este último, Joaquín Guzmán López, no se proporcionaron mayores detalles. Se sabe que los dos son producto de la relación que mantuvo el Chapo Guzmán con Griselda Guadalupe López Pérez y/o Silvia Escoto Muñoz.
Joe Biden afirmó que los cárteles de la droga que operan como organizaciones transnacionales alimentan la epidemia de opioides y muertes por sobredosis en Estados Unidos. En esas acciones son apoyados por sus facilitadores de precursores químicos y la suma de violencia relacionada con el narcotráfico afecta a las comunidades norteamericanas.
Todo ello, indicó el presidente, constituye una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional, la política exterior y la economía estadounidense.
“Esta grave amenaza obliga a nuestro país a modernizar y actualizar nuestra respuesta al tráfico de drogas. Por la presente declaro una emergencia nacional para hacer frente a esa amenaza”, redactó en su Orden Ejecutiva de este 15 de diciembre.
Por la mañana de este miércoles, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, había adelantado que el gobierno de EEUU publicaría un reporte sobre los principales traficantes de fentanilo desde México.
Están por sacar una resolución condenando a estas personas, a los que ellos consideran que son los que promueven el tráfico de estas drogas
El Cártel de Sinaloa, según registros de autoridades estadounidenses, fue fundado en la década de 1980 e inicialmente operaba como una coalición de los narcotraficantes más poderosos de México.
Pero a principios del 2000, el Chapo Guzmán e Ismael Zambada García, el Mayo, consolidaron su dominio y se convirtieron en una de las organizaciones del crimen transnacional más notorias del país. Desde la costa del Pacífico han traficado varias toneladas de drogas ilícitas, incluidos fentanilo y heroína, hacia Estados Unidos. Guzmán Loera fue detenido de manera definitiva en 2016 y se le juzgó en Nueva York, donde lo condenaron a cadena perpetua más 30 años que purga en una prisión de máxima seguridad en Colorado.