Redacción
Estados Unidos.- Un exhaustivo análisis de los cementerios ávaros ha proporcionado nuevas perspectivas sobre la vida y las costumbres de este pueblo estepario que gobernó gran parte de Europa del Este entre los siglos VI y IX. Liderado por el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig en colaboración con grupos de investigación de Hungría, Austria y Estados Unidos, el estudio publicado en la revista Nature ofrece una visión detallada de la organización social y familiar de los ávaros.
La investigación, basada en ADN antiguo y restos arqueológicos de aproximadamente 100,000 tumbas excavadas, revela que los ávaros practicaban un estricto sistema de descendencia patrilineal y patrilocalidad. Los varones permanecían en la comunidad después del matrimonio, mientras que las mujeres se trasladaban a otras comunidades a través de enlaces matrimoniales, desempeñando un papel crucial en la cohesión social.
Gracias al análisis de 424 individuos y la reconstrucción de extensos pedigríes de hasta nueve generaciones, los investigadores descubrieron la multiplicidad de parejas reproductivas y la práctica de uniones de levirato entre individuos masculinos emparentados, lo que evidencia una detallada memoria de ascendencia dentro de la sociedad ávara.
El estudio también identificó una transición temporal dentro de uno de los yacimientos analizados, reflejando cambios políticos y arqueológicos en toda la región de los Cárpatos. A pesar de esta transición, la continuidad genética a nivel de ascendencia sugiere que las sustituciones de comunidades enteras pueden ser imperceptibles sin el análisis detallado de comunidades completas.
Estos hallazgos proporcionan una visión única de la vida y las costumbres de los ávaros, contribuyendo significativamente al entendimiento de la historia europea durante la Alta Edad Media.