En México, el 92 por ciento de las donaciones de sangre son de reposición —es decir, hechas para familiares o conocidos en necesidad— y solo el 8.1 por ciento se realiza de manera altruista, según datos compartidos por José Miguel Ramos, administrador del Banco de Sangre de la Cruz Roja Mexicana.
En vísperas del Día Mundial del Donante de Sangre, que se conmemora el 14 de junio, Ramos subrayó la urgencia de promover una cultura de donación voluntaria. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), México debería alcanzar al menos 5 millones de donaciones anuales para cubrir su demanda hospitalaria. No obstante, en 2024 apenas se lograron 1.5 millones.
Durante la firma de un convenio entre la Cruz Roja Mexicana y la aerolínea Volaris, Ramos destacó los avances logrados gracias a unidades móviles de recolección instaladas en universidades y empresas. Actualmente, el 49.4 por ciento de las donaciones recibidas por la Cruz Roja ya son voluntarias, lo que permitió salvar más de 24 mil vidas el año pasado. “Esto es un verdadero éxito en el poco tiempo que llevamos, y vamos por más”, afirmó.
Explicó que si apenas el 5 por ciento de la población adulta donara sangre una vez al año, se evitarían muertes por desabasto y no habría necesidad de posponer cirugías. Además, recordó que cada unidad de sangre tiene una vida útil de 30 días, lo que hace fundamental contar con una logística eficiente.
En este contexto, la alianza con Volaris busca agilizar el transporte de sangre en todo el país. José Luis Suárez, vicepresidente sénior de la aerolínea, anunció que las unidades recolectadas serán trasladadas gratuitamente mediante sus operaciones de carga. “Es un compromiso logístico y humano, que asumimos con toda responsabilidad para que cada unidad de sangre marque la diferencia entre la vida y la muerte”, declaró.
Por su parte, Carlos Frener Figueroa, presidente nacional de la Cruz Roja Mexicana, enfatizó que cada donación puede salvar hasta tres vidas adultas o seis infantiles, extrayendo apenas 450 mililitros por persona. Reiteró el objetivo de convertir la donación en un acto cotidiano y colectivo: “Queremos que en México donar sangre no sea la excepción, sino la regla”.