La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que para el año 2026 el gobierno federal destinará un billón de pesos a programas sociales, en respuesta al crecimiento de los padrones de beneficiarios y la actualización inflacionaria. Así lo confirmó este viernes durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
Sheinbaum destacó que en 2025 se ejercerán cerca de 850 mil millones de pesos en programas de Bienestar, cifra que incrementará el año siguiente con el propósito de alcanzar a más familias mexicanas. “Estamos hablando de que probablemente el próximo año lleguemos a un billón de pesos distribuidos de manera directa a la población, a cerca de 30 millones de familias que, sin intermediarios, reciben un apoyo directo”, puntualizó.
La mandataria sostuvo que esta política no solo transforma la vida de millones de personas, sino que también impulsa la economía nacional. “Ese recurso antes se quedaba en unos cuantos”, subrayó.
Durante el mismo evento, la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel, informó que actualmente se han entregado pensiones a 8.7 millones de personas adultas mayores, con una inversión de 44 mil 500 millones de pesos.
En cuanto al programa Jóvenes Construyendo el Futuro, el secretario del Trabajo, Marath Baruch Bolaños, indicó que para 2025 se proyecta una inversión de 24 mil 205 millones de pesos, con atención prioritaria en municipios con altos índices de marginación o violencia, como Acapulco, Chilpancingo, San Cristóbal de las Casas, León y Tijuana, entre otros.
Asimismo, las becas del Gobierno de México actualmente benefician a más de 13 millones de estudiantes, con una inversión anual de casi 200 mil millones de pesos.
Por su parte, Alejandro Svarch Pérez, director del IMSS Bienestar, informó que el programa “La Clínica es Nuestra” contará con una inversión de 4 mil 707 millones de pesos, los cuales serán aplicados en 8 mil 672 clínicas comunitarias a lo largo del país.
El aumento histórico en el presupuesto social forma parte de la estrategia de la administración federal para fortalecer el tejido social, reducir desigualdades y fomentar el desarrollo regional, según indicó el gabinete presidencial.