En un firme compromiso con la salud pública, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que los recursos provenientes del aumento de impuestos a bebidas azucaradas y cigarros serán destinados a un fondo de salud. Este fondo tiene como objetivo principal atender las enfermedades derivadas del consumo de estos productos, según se informó en la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
La mandataria subrayó que esta medida, incluida en el paquete económico para 2026, no debe entenderse como una estrategia meramente recaudatoria. «Todos los fondos que se recauden van directamente a un fondo de salud; tiene que ver con lo que hemos estado hablando aquí del daño que provocan las bebidas azucaradas. Es una decisión no recaudatoria, sino que tiene que ver con la salud de las y los mexicanos», afirmó Sheinbaum.
Para reforzar esta postura, la presidenta adelantó que el gabinete de Salud presentará mañana un informe detallado sobre cómo se emplearán los recursos recaudados gracias a este incremento impositivo. Además, una reciente encuesta revela que, aunque el 88% de los mexicanos reconoce el daño de las bebidas azucaradas, el 50% de la población aún las consume regularmente.
El Paquete Económico presentado al Congreso destaca la implementación de «impuestos saludables» en 2026. Estos impuestos tienen como finalidad desincentivar el consumo de productos que afectan la salud física y mental de la población, marcando un paso significativo hacia un México más saludable.