Redacción
México.- La conectividad en la era digital facilita la difusión de contenido que puede dañar la reputación de particulares, figuras públicas, empresas e instituciones. Jessica Oceguera Rosales, presidenta de la fundación Mujeres Transformando México, subraya que las redes sociales y los medios de comunicación son los canales más comunes donde se publica información que puede comprometer la imagen de una persona.
Oceguera ha experimentado personalmente el daño moral. En 2019, la publicación de un video en redes sociales por parte de la Policía Municipal de Metepec, Estado de México, afectó negativamente su carrera de 20 años y sus aspiraciones políticas. Tras una investigación, descubrió que México está atrasado en la regulación del daño moral y la reparación del daño.
«Únicamente hay un precedente en México donde un abogado solicitó la restitución de su imagen y la reparación del daño, pero hay familias completas que han sido sometidas a estas situaciones y quedan comprometidas,» explicó Oceguera.
En respuesta, Oceguera y su equipo están desarrollando una iniciativa de ley para regular el daño moral causado por la difusión de información falsa o sin sustento en redes sociales y otros medios de comunicación. «La lucha es como sociedad civil en este momento y estamos en el proceso del diseño de la iniciativa de ley, la estamos construyendo con lo que hay y con las buenas prácticas y experiencias internacionales,» afirmó.
Jessica Oceguera y sus colegas han dedicado cinco años a investigar este tema tanto a nivel nacional como internacional, con el objetivo de que la propuesta no vulnere otros derechos, como la libertad de expresión. «Son apenas cinco años en los que nos hemos metido de lleno al tema para saber qué existe en nuestro país y hasta dónde podemos direccionar garantizando siempre también la libertad de expresión,» sentenció.
La iniciativa se impulsará a partir de la siguiente legislatura, que comenzará en diciembre, una vez que el Instituto Nacional Electoral haya distribuido los escaños y curules en el Congreso de la Unión. El enfoque principal de la propuesta será la reparación del daño moral y la restitución del daño.
Según algunas publicaciones en redes sociales, Jessica Oceguera era militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Sin embargo, debido a los hechos mencionados, sus aspiraciones se vieron truncadas y su familia también resultó afectada, obligándolos a adoptar cambios en su vida.
Con esta iniciativa, Oceguera y su equipo buscan proteger a las personas de los efectos negativos de la difusión irresponsable de información, promoviendo un entorno digital más justo y responsable.