Redacción
México.- La Liga MX anunció la suspensión por cinco años del cuerpo directivo del club Querétaro así como un año de veto para el estadio La Corregidora por los hechos violentos registrados el sábado durante el partido de Gallos Blancos contra Atlas.
Yon de Luisa, presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), y Mikel Arriola, presidente de Liga MX, fueron los encargados de dar a conocer los acuerdos tomados por la Asamblea de Dueños donde destaca la inhabilitación por cinco años de todos sus derechos federativos para la actual administración del club Querétaro, integrada por Gabriel Solares, Adolfo Ríos, Greg Taylor y Manuel Velarde.
Las autoridades decidieron multar al club con 1.5 millones de pesos. Además, se decidió que la franquicia queretana regresará a manos del Grupo Caliente, quien vendió el certificado de propiedad a la directiva recién destituida, para administrarlo. Con ello, la familia Hank tendrá plazo de un año para vender al equipo y, en caso de no lograr concretar la operación, la Liga MX se comprometió a operar al club.
Las autoridades acordaron vetar definitivamente del fútbol mexicano a las personas encontradas culpables del conflicto registrado el sábado, donde 26 personas resultaron lesionadas.
En lo deportivo, se decretó que, de acuerdo con el reglamento, el partido correspondiente a la fecha nueve del Grita México C22 tenga como marcador oficial 0-3 a favor del Atlas.
“Se pudo comprobar, en efecto, que hubo omisiones considerables, principalmente de la empresa de seguridad privada, de las policías, y por lo tanto del propio club, que es el principal culpable de su contratación y su coordinación”, aseguró De Luisa.
De Luisa también detalló que se aplica veto por un año para el estadio La Corregidora, casa de los Gallos Blancos, por lo que el equipo de Liga MX, así como el femenil y fuerzas básicas deberán de disputar sus encuentros a puerta cerrada durante el plazo de la sanción.
Los grupos de animación de los Gallos Blancos, señalados como culpables de los hechos violentos el sábado pasado en La Corregidora, también se hicieron acreedores a una sanción, por lo que fueron suspendidos por tres años, en los que estarán impedidos de estar presentes en los juegos de local del equipo, y un año también de suspensión para acudir a encuentros donde Querétaro sea visitante.
“No es una sanción contra Querétaro, es una sanción contra su club y su equipo de animación”, señaló el presidente de FMF.
En lo que se refiere a las porras del Atlas, también recibió una suspensión de seis meses para poder estar presentes en los partidos que se equipo dispute fuera del estadio Jalisco.
“Queremos obligarlos a dejar el anonimato, no queremos criminales disfrazados de grupos de animación, estamos muy atentos de la actividad de la Fiscalía de Quéretaro porque ahí vamos a aprender muchas cosas. Hubo una violencia extraordinaria que no habíamos visto en un partido de futbol mexicano”, declaró Mikel Arriola.
Otra decisión de los propietarios de equipos de Liga MX fue la de aplicar veto definitivo para ingresar a cualquier evento organizado por el organismo y FMF a las personas encontradas culpables de los hechos acontecidos el sábado pasado.
Por último, se anunció la creación de la Dirección de Seguridad e Inteligencia compartida entre la Liga MX y la FMF para atender, de manera conjunta, todos los asuntos relacionados con la seguridad en los estadios del país.