Redacción
Brasil.- El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva dijo este sábado en Madrid que decidirá «entre febrero y marzo» del año que viene si presenta finalmente su candidatura a las elecciones presidenciales.
“Para volver haciendo menos, es mejor no volver», dijo el exmandatario, de 76 años, durante un acto celebrado en Casa de América y acompañado de la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, y del exvicepresidente del gobierno, Pablo Iglesias.
El expresidente brasileño recuperó todos sus derechos políticos y ahora podrá enfrentarse al actual mandatario, Jair Bolsonaro, en las elecciones del año que viene, tras casi dos años de inhabilitación por unas condenas relacionadas con la trama de corrupción Lava Jato, ahora revocadas.
Lula da Silva reiteró que, de volver a efectuar un intento al poder, debe tener un significado político más allá del mero retorno y volver a abanderar un programa contra la desigualdad y desde la izquierda.
“Tenemos que plantear la desigualdad en el centro de la agenda, y me parece que la cuestión de la inequidad es una agenda que tiene que ser una lucha de izquierdas y del movimiento sindical», explicó.
«Yo no puedo hacer menos de lo que he hecho, ese es el desafío que tengo», declaró el exmandatario antes de avisar de que «la situación de Brasil está peor que en 2003», el año en que asumió el poder, en el principio de casi una década de mandato.
El expresidente brasileño agradeció todo el «cariño» recibido durante su inhabilitación como un valor fundamental a la hora de sopesar su posible candidatura.
“Lo que han hecho por mí y por la causa ha sido algo tan noble que me hizo querer volver a ser candidato. Estoy convencido de que es posible recuperar Brasil», añadió.