La empresa de juguetes Mattel, conocida por fabricar las icónicas muñecas Barbie, enfrenta una demanda colectiva tras un error en el embalaje de sus muñecas inspiradas en la película «Wicked», lanzadas al mercado en noviembre pasado.
El embalaje contenía un enlace que, en lugar de redirigir al sitio oficial de la película de Universal Pictures protagonizada por Cynthia Erivo y Ariana Grande, conducía a la página web de la productora de contenido para adultos Wicked Pictures, exponiendo a los usuarios a material pornográfico.
Holly Ricketson, una de las denunciantes, explicó en su demanda, presentada en California, que compró la muñeca para su hija menor, quien accedió al enlace y fue expuesta a imágenes de contenido sexual explícito. Según Ricketson, tanto ella como su hija quedaron “horrorizadas” tras descubrir el contenido. “Si hubiera sabido de este defecto inapropiado, jamás habría comprado el producto”, señaló.
Los denunciantes exigen una compensación económica por daños y perjuicios, argumentando que el error hace que los productos sean inapropiados para el público infantil al que están dirigidos y carezcan de valor.
En noviembre, tras la polémica, Mattel emitió un comunicado en el que reconoció que se trataba de un “error tipográfico” y recomendó a los compradores desechar el embalaje o cubrir el enlace. Aunque la empresa retiró las muñecas del mercado, el incidente generó críticas y se viralizó en redes sociales.
Pese a la controversia, la película «Wicked» no se ha visto afectada, con una recaudación global que supera los 360 millones de dólares desde su estreno. Mattel, sin embargo, enfrenta un desafío legal que podría afectar su reputación en el mercado de juguetes infantiles.