A pesar de que el Congreso mexicano ha recibido más de un centenar de propuestas para regular el uso de la inteligencia artificial (IA) desde 2020, ninguna se ha convertido en ley, y hasta el momento no existen principios rectores ni una agenda legislativa clara sobre el tema, advirtió José Mario de la Garza, presidente de la organización Perteneces A.C.
El especialista subrayó que los sistemas de IA ya tienen impacto directo en decisiones sensibles, como la aprobación de créditos, admisiones universitarias o vigilancia por reconocimiento facial, lo cual representa una transferencia de poder que, sin regulación, carece de controles democráticos y mecanismos de rendición de cuentas.
“La inteligencia artificial no es solo una herramienta técnica. Es una decisión constitucional sobre qué tipo de sociedad queremos construir”, sostuvo De la Garza.
Advirtió que sin una legislación robusta basada en transparencia, responsabilidad y derechos humanos, la IA podría afianzar formas invisibles de discriminación, vigilancia masiva y despojo, reforzando desigualdades preexistentes en lugar de mitigarlas.
Un modelo «a la mexicana», aún indefinido
Aunque desde el Senado se ha hablado de construir un modelo regulatorio “a la mexicana”, hasta ahora no se ha presentado una propuesta integral ni se han definido principios rectores que orienten el debate legislativo, criticó el presidente de Perteneces A.C. Además, urgió a que el proceso legislativo se abra a la participación ciudadana y se fundamente en los valores de dignidad y justicia social.
Iniciativas dispersas y sin avance
Según datos del Congreso, más de 100 iniciativas relacionadas con IA han sido presentadas por legisladores de distintas fuerzas políticas en los últimos cuatro años. Estas abordan temas como salud, educación, derechos laborales, seguridad, procesos electorales y protección de datos personales. Sin embargo, ninguna ha logrado avanzar hasta su aprobación final.
Entre las propuestas destacadas está la del diputado Santiago González Soto (PT), quien plantea reformas para proteger a actores de doblaje frente al uso de voces generadas por IA en producciones audiovisuales. Su iniciativa busca garantizar el consentimiento informado y la protección de derechos laborales y de autor.
Otra propuesta relevante proviene de la diputada Delhi Miroslava Domínguez (Morena), quien propone sancionar la creación y difusión de imágenes, videos o audios íntimos sin consentimiento, incluyendo los generados por IA. Además, se han planteado penas de prisión para quienes utilicen esta tecnología para fabricar contenidos falsos o manipular evidencia audiovisual.
Preocupación en el ámbito electoral
El uso de inteligencia artificial en procesos electorales también ha encendido alertas. Algunas iniciativas buscan prohibir el uso de IA para manipulación de votantes, suplantación de identidad o difusión de noticias falsas durante campañas.
Recientemente, el Instituto Nacional Electoral (INE) inició una investigación sobre el presunto uso de voz generada por IA en un promocional oficial, tras quejas del gremio de actores de doblaje, que exige reglas claras y éticas sobre el uso de esta tecnología en materiales públicos.
Un llamado urgente a legislar con enfoque en derechos
Para José Mario de la Garza, el desafío va más allá de normar algoritmos: se trata de regular el poder que estas tecnologías representan. De no hacerlo, México corre el riesgo de permitir que la IA avance sin control ni justicia.
“Este no es solo un asunto técnico o administrativo. La regulación de la inteligencia artificial debe ser un tema de Estado y de ciudadanía”, concluyó.