En abril de 2025, la economía mexicana generó 165.8 mil nuevos empleos, impulsada principalmente por el sector informal, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Sin embargo, este crecimiento ocultó una tendencia preocupante: la pérdida de 92.9 mil plazas en el empleo formal, en concordancia con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que reportó una baja de 47.4 mil afiliaciones.
Mientras el mercado laboral en general se expandió, la informalidad absorbió 258.8 mil nuevos trabajadores, marcando una diferencia frente al retroceso en el sector formal. La caída se atribuye a recortes no solo en el sector privado, sino también en áreas como la administración pública federal y estatal, así como en las fuerzas armadas.
A pesar de estos contrastes, la tasa de desocupación se redujo ligeramente, pasando de 2.62% en marzo a 2.59% en abril, lo que representa 1.56 millones de personas desempleadas en el país.
Por sectores, el agropecuario lideró la generación de empleos con 431 mil nuevas plazas, seguido por la industria con 254 mil y 8.3 mil más en sectores no identificados. En contraste, los servicios enfrentaron un severo retroceso, con la pérdida de 528 mil puestos de trabajo.
Dentro de las actividades específicas, la manufactura fue el mayor motor de empleo con 313 mil nuevos puestos, seguida del comercio con 293 mil, y servicios sociales con 25 mil. Por otro lado, los sectores más golpeados fueron transportes, comunicaciones, correo y almacenamiento, que recortaron 469 mil empleos; el gobierno y organismos internacionales con 149 mil menos; y servicios profesionales, financieros y corporativos con una caída de 139 mil plazas.
Los datos reflejan un mercado laboral que, aunque dinámico, enfrenta importantes desafíos en la creación de empleo formal y en sectores clave de servicios.