Redacción
El Paso.- La Administración del presidente Joe Biden presentará recursos legales en contra de la barrera de boyas flotantes instalada a principios de este mes por el Gobierno de Texas en una sección del río Bravo para prevenir los cruces irregulares de migrantes desde Ciudad Acuña en México.
Una carta enviada por el Departamento de Justicia de EU al Gobierno de Texas asegura que el llamado «muro flotante» es violatorio de la Ley de Ríos y Puertos de 1899 por lo que buscarán remedios legales.
«La Ley prohíbe la creación de cualquier obstrucción a la capacidad navegable de las aguas de EU, y además prohíbe la construcción de cualquier estructura en dichas aguas sin la autorización del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EU», dice una porción de la carta revelada por diversos medios estadounidenses.
«Esta barrera flotante representa un riesgo para la navegación y para la seguridad pública en el Río Bravo, y presenta preocupaciones humanitarias. Por lo tanto, tenemos la intención de buscar los remedios legales apropiados, que pueden incluir buscar medidas cautelares que obliguen eliminar las obstrucciones».
De 304 metros de extensión, el llamado «muro flotante» es una barrera de boyas instalado en las aguas del Río Bravo por el Gobernador republicano Greg Abbott y que ya enfrenta demandas legales en las Cortes estatales de Texas por parte de un grupo de ciudadanos de EU practicantes de canotaje.
«Las acciones del Estado de Texas violan la Ley federal, plantean preocupaciones humanitarias, presentan riesgos graves para la seguridad pública y el medio ambiente y pueden interferir con la capacidad del Gobierno federal para llevar a cabo sus funciones oficiales», afirma la carta firmada por Todd Kim, el Fiscal General adjunto del Departamento de Justicia de EU para asuntos de medio ambiente.
Apenas la semana pasada, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México aseguró que envió una nota diplomática al Gobierno de EU por la instalación de las citadas boyas flotantes en la sección del Río Bravo, entre Ciudad Acuña, Coahuila, y la ciudad de Eagle Pass, Texas.
De acuerdo con las consideraciones presentadas por el Gobierno mexicano, la instalación del llamado «muro flotante» en el Río Bravo viola dos instrumentos legales firmados con EU: por un lado, el Tratado de Aguas Internacionales de 1944 y por otro lado, el Tratado de Límites de 1970.