Redacción
México.- El subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, informó que han sostenido reuniones con la Federación Mexicana de Futbol y la Liga MX para establecer la regulación de agentes de jugadores y mantener la vigencia de un convenio con la Unidad de Inteligencia Financiera, acordado desde 2019, para evitar esquemas de defraudación fiscal, de simulación de operaciones o de lavado de dinero.
En la conferencia de Palacio Nacional aseguró que también se han llevado a cabo medidas de protección en estadios con instituciones de seguridad pública –de la que destacó un aumento en presencia de 41%– y empresas de seguridad privada autorizadas.
Por parte de las empresas iniciaron el programa Fan ID para identificar a los aficionados y evitar actos violentos dentro de los estadios y para que en caso de un acto de irregularidad se les pueda ubicar rápidamente; así como un protocolo contra la desigualdad de género, el racismo y la falta de inclusión en el futbol.
En torno a los agentes de jugadores, “la Asamblea de la Liga ordenó el endurecimiento del marco normativo y su alineación con las disposiciones de la FIFA, entre otras, prohibir la representación dual, que aquí de algún modo se expuso, es decir: que haya un mismo representante entre jugadores y equipos generando un conflicto de interés entre ambos, y que se generan operaciones simuladas precisamente para que haya transparencia en los contratos”, informó.
Mejía Berdeja también expuso que se deben transparentar las relaciones contractuales entre los agentes deportivos y quien sea su cliente; buscarán proteger los derechos de los menores de edad, evitar “que sean mal utilizados o haya abusos en sus actividades deportivas, porque se va a tratar u obligar, mejor dicho, que siempre se involucre a sus padres o tutores”.
Con el convenio incluyen limitar las comisiones que se pagan entre jugadores y clubes a intermediarios, con base en las nuevas reglas de la Federación Internacional de Futbol, donde se contempla que no pasarán de entre el 2 y 5% de la operación, que esté sujeto a cuestiones de carácter fiscal y tendrá que declararse.
Los clubes también deberán sujetarse a controles económicos de acuerdo a disposiciones y normas de anticorrupción.
El funcionario acotó que, en colaboración con la UIF, se detectarán irregularidades en los clubes y ejercerán atribuciones legales con la colaboración de la Federación Mexicana de Futbol.
Entre las medidas adoptadas se deberán presentar estados financieros auditados, bajo el cumplimiento de obligaciones ante la autoridad hacendaria, así como las declaraciones anuales; también deberán justificar las partidas de los presupuestos de ingresos y egresos de los clubes; elaborar reportes de comportamiento legales y fiscales de los socios de los mismos; “y se va a continuar con los trabajos para garantizar la transparencia en la contratación de jugadores y técnicos, como se hace desde 2019”.
Tras los hechos en el estadio Corregidora en marzo de 2022, el subsecretario expuso que “se establecieron una serie de mecanismos que corresponden a estas instituciones, pero desde luego, nosotros participamos como coadyuvantes, como es el caso de que todos los clubes cerraron zonas que ocupaban grupos de animación visitante, las barras, que era donde se daban los conatos ‘de bronca’ o los pleitos”.
Otra de las medidas es que se busca la credencialización de las barras para designarlos en zonas donde se puedan identificar y que en estos puntos no puedan entrar menores de edad, para su resguardo.
Se busca que todas las empresas de seguridad privada estén autorizadas con permisos federales y no sólo estatales para tener un estándar homologado, “para que no pase lo que ocurrió en el estadio Corregidora, donde la supuesta empresa de seguridad que tenía un registro estatal no cumplía con las características para prestar este servicio”, indicó.