Redacción
Tijuana.- En el marco del Día Mundial del Refugiado, Dagmara Mejía, representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Baja California, destacó que Tijuana ha experimentado una notable transformación: de ser simplemente un punto de paso para migrantes, se ha convertido en un destino permanente para muchas personas en busca de seguridad y oportunidades.
Según datos de ACNUR hasta abril de 2024, se ha registrado un incremento significativo en el número de personas que solicitan asilo en la región. En 2023, se recibieron 4,155 solicitudes de asilo procedentes de 41 países diferentes en Baja California. Entre los países de origen más destacados se encuentran Haití, con el 49% de las solicitudes, seguido por Honduras, Guatemala, Colombia, El Salvador y Chile.
Mejía subrayó que este fenómeno refleja una dinámica creciente en los últimos años, donde las redes familiares y sociales desempeñan un papel crucial en la atracción de nuevos migrantes y refugiados a la ciudad. Destacó que Tijuana ofrece un entorno propicio para la reconstrucción de vidas, tanto para migrantes históricos como para aquellos que buscan refugio por conflictos y persecuciones en sus países de origen.
El 85% de los solicitantes de asilo manifestaron su intención de permanecer en Baja California, y un impresionante 93% de ellos prefieren establecerse en Tijuana, principalmente por las oportunidades laborales que ofrece la ciudad.
Este cambio demográfico y social no solo ha marcado un aumento en las solicitudes de asilo, sino que también refleja una evolución en la percepción de Tijuana como un destino final en lugar de una mera etapa transitoria. ACNUR continúa monitoreando esta situación y trabajando para garantizar la protección y los derechos de los refugiados y migrantes en la región fronteriza.
Este fenómeno resalta la importancia de políticas y programas que apoyen la integración social y económica de los migrantes y refugiados en comunidades como Tijuana, donde la diversidad y la solidaridad se han convertido en pilares fundamentales de la convivencia diaria.