Redacción
México.- El alcalde del municipio de Tangancícuaro, en Michoacán, David Melgoza Montañez, no será encarcelado por matar a las perritas Buba y Canela el 9 de agosto. A pesar de haber sido vinculado a proceso por el delito de crueldad animal y admitir haber disparado contra las cachorras, alegando «defensa propia», su abogado logró la suspensión condicional del proceso al solicitar la reparación del daño. Esta solicitud no fue objetada por las dueñas de las perritas.
Como parte de la compensación, el alcalde de Morena tuvo que pagar 38 mil pesos a los demandantes: 13 mil pesos por daño psicológico y 25 mil pesos como reparación del daño por la muerte de Buba y Canela. Esta cantidad fue abonada durante la audiencia. Además, acordó con el juez instalar un centro de atención animal, emitir un reglamento de bienestar animal y ofrecer disculpas públicas.
El incidente ocurrió el 9 de agosto, cuando el alcalde y sus guardaespaldas persiguieron y dispararon a las perritas en la calle, resultando en su muerte. El alcalde alegó defensa propia, afirmando que las perritas eran agresivas y lo atacaron. Sin embargo, las imágenes de una cámara de seguridad mostraron a las perritas jugando antes del incidente.
A pesar de la vinculación a proceso y la admisión del acto, el alcalde no enfrentará una pena de cárcel debido a la suspensión condicional del proceso. En lugar de ello, se le impuso una compensación monetaria y medidas como instalar un centro de atención animal y emitir un reglamento de bienestar animal.
Este caso ha generado controversia y críticas en México, ya que ha sido percibido como un ejemplo de impunidad ante actos de crueldad animal por parte de una figura pública. Las organizaciones defensoras de los derechos de los animales han expresado su descontento con la decisión.