La privacidad de las conversaciones con chatbots está en peligro, advierte la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D). La organización ha revelado que conversaciones privadas con herramientas de inteligencia artificial, como ChatGPT, Claude, DeepSeek o Grok, pueden quedar expuestas en la web. Esto representa un riesgo considerable para la información sensible compartida por los usuarios.
Imagina que hablas de temas personales o laborales con un chatbot y esa información termina accesible en Google. Este aterrador escenario es una realidad, según un reportaje de Fast Company. El medio encontró más de 4,500 conversaciones privadas de ChatGPT indexadas por Google, algunas con detalles muy sensibles.
La razón detrás de esto es el uso de la función «Compartir» que, aunque parecía segura, permitía que los enlaces fueran rastreados por Google. OpenAI, la empresa detrás de ChatGPT, retiró esta función tras el escándalo, pero la preocupación persiste. Otros chatbots, como Claude, también han expuesto información privada.
Además, el grupo Digital Digging encontró más de 130 mil enlaces a conversaciones privadas, lo que subraya la magnitud del problema. Datos personales, información confidencial e incluso posibles intenciones criminales se hicieron públicos.
El investigador Dead1nfluence advierte que esta vulnerabilidad es un posible atractivo para atacantes malintencionados. La sensación de seguridad de los usuarios, similar a la que brindan plataformas como Google Docs, resulta ser engañosa. La R3D enfatiza la importancia de no compartir información sensible en estas plataformas, ya que el riesgo de exposición es alto.